CASONAS
“Montemayor tuvo una burguesía de gran esplendor que a buen seguro dejó un importante sello cultural en la ciudad. Dos ejemplos de las moradas de estas importantes casas son la Casa Grande, la Casa Blegny y la Casa del Corregidor de la Villa”
CASA GRANDE
Conocida coloquialmente en Montemayor como “Casa Grande” ha sido la residencia tradicional de la familia Luque Granados. El origen de esta familia lo encontramos cuando hacia 1545 se traslada a Montemayor la familia Luque, proveniente del pueblo cordobés del mismo nombre. La estirpe la encabezaban D. Bartolomé de Luque y Escudero y Dª Elvira Ruiz de la Torre, descendientes del conquistador de la villa de Luque.
Una familia hidalga
Fueron recibidos en Montemayor por el Concejo de la villa entre honores, como hidalgos de notoria sangre, ordenando que se les guardasen todos los honores. De este tronco común descendería los Luque Granados, estirpe que durante mucho tiempo ejercieron su influencia y poder desde las altas esferas eclesiásticas (Santo Oficio de la Inquisición) y como alcaides del castillo Ducal.
Esta importante posición en la sociedad cordobesa y montemayorense les permitió ejercer como mecenas en obras pías y otras de carácter artístico, como reformas en la Parroquia de la Asunción y la construcción de algunas de las ermitas de la localidad.
Arquitectura señorial de época barroca
Desde el punto de vista artístico la Casa Grande es una muestra del barroco del siglo XVIII. Destaca su portada de piedra, su impresionante escalera señorial de mármol de diferentes tonalidades y su colección de cuadros de mérito artístico. Sus puertas son de nogal y cuenta con muebles de época.
Este edificio es de carácter particular y privado, por esta razón solo se puede admirar por fuera, ya que no es visitable.
CASA BLEGNY
En el último tercio del siglo XVIII se instala en Montemayor D. Manuel Isidro Blegny y Rubio, acompañado de su esposa e hijos. Oriundo de Nidans (Besançon, Francia), este hidalgo notorio de sangre vino a Montemayor porque los señores de la villa le otorgaron el cargo de Alcaide del Castillo.
El premio a su fidelidad…
Este importante cargo le fue concedido en recompensa a los servicios militares en las guerras con Flandes de sus antepasados. De este modo, al igual que la familia Luque, solicitó al Concejo de la Villa el reconocimiento de sus derechos como hidalgo. La corporación, tras estudiar su caso, prestos se dispusieron a conceder dichos honores. Su residencia en Montemayor fue la llamada “Casa Blegny”, que aúna lo andaluz (blanco de su fachada), con lo señorial castellano (escudo heráldico de la familia).
CASA DEL CORREGIDOR
De la Edad Moderna proviene esta casona típica de Montemayor, residencia tradicional del Corregidor de la Villa. Un corregidor era un funcionario real del imperio español cuyo comprendía varios ámbitos y emplazamientos, desde el provincial hasta el municipal, siendo el lazo de unión entre estos poderes territoriales y el monarca. Su jurisdicción positiva fue el Corregimiento.
Un funcionario real en el pueblo de Montemayor
Entre sus funciones estaba presidir los ayuntamientos y administrar justicia, promover y ejecutar todo tipo de obra pública, mantener la salubridad y la policía, garantizar los abastos de las poblaciones, establecer los precios de la época, verificar pesas y medidas, evitar el contrabando, las mercancías prohibidas y en general guardar los buenos usos del comercio. En general, era un funcionario gubernamental que velaba por el cumplimiento de las leyes del reino.
En Montemayor encontramos la llamada Casa del Corregidor, tradicionalmente vinculada a la residencia de esta figura tan importante. Se trata de una casona de dos plantas y grandes dimensiones, ubicada anexa a la muralla del Castillo Ducal, cuyos vanos y ventanas son estrechos y presenta un arco en su zona central.